lunes, 28 de mayo de 2012

¿y los sentimientos ajenos?



¡Mucha responsabili­dad, muchísima responsabilidad, cuando uno se burla de otro con su compasión! ¡Un adulto tiene que pensar, an­tes de inmiscuirse en un asunto, hasta dónde está dis­puesto a llegar! ¡No se juega con los sentimientos ajenos! Lo admito, usted encandiló a esa buena gente llevado por los motivos más nobles y honrados, pero en nuestro mundo no importa si uno actúa con dureza o con timi­dez, sino sólo lo que al final se consigue o se provoca.
La Impaciencia del Corazón.Stefan Zweig

No hay comentarios:

Publicar un comentario